Descubre
Lo que dice la ciencia
Por qué los consejos tradicionales fallan y qué hacer en su lugar.
El cerebro en crisis:
Durante un meltdown, el sistema límbico (centro emocional) domina sobre la corteza prefrontal (razón). Esto explica por qué palabras como «cálmate» no funcionan (García et al., 2023).
Contención emocional:
Un estudio en Journal of Autism and Developmental Disorders (2022) mostró que la regulación del cuidador predice la duración del meltdown. Si tú mantienes lax| calma, el episodio será más corto (Lee & Martínez, 2022).
Post-crisis:
El 80% de niños neurodivergentes experimentan «resaca emocional» (agotamiento post-meltdown). Ofrecer hidratación y silencio reduce este efecto (Dawson, 2021).
Ejemplo: Si notas que tu hijo empieza a golpear el suelo, en lugar de acercarte inmediatamente, toma 3 segundos para:
Respirar 4-7-8 (inhala en 4, sostén en 7, exhala en 8).
Repite una frase ancla: «Esto es temporal, yo soy su puerto seguro».
Ejemplo: Si el meltdown ocurre en un centro comercial:
Guía a tu hijo hacia una esquina menos iluminada.
Usa tu cuerpo como «pantalla» para reducir estímulos visuales (ponte frente a él, no lo abraces).
Espera 15-20 minutos antes de hablar del episodio. Ofrece:
Un vaso de agua fría (regula la temperatura corporal).
Opciones no verbales: dibujar o apretar una pelota antiestrés.
La terapia Calma te brinda herramientas personalizadas para estos momentos. Agenda tu sesión aquí.
Tu regulación emocional es el primer paso para ayudar a tu hijo.
Los meltdowns son tormentas neurológicas, no falta de disciplina.
No estás sola: Hay una tribu esperándote.